En vísperas de un nuevo aniversario del 24 de Marzo, día de la Memoria, la Verdad y la Justicia, el Concejo Deliberante de San Miguel de Tucumán rindió homenaje al presidente del Senado provincial Dardo Molina y al abogado radical defensor de presos políticos Ángel Gerardo Pisarello, ambos víctimas del terrorismo de estado, desaparecidos, torturados y asesinados durante la última dictadura cívico-militar.

«Los pueblos que olvidan están castigados a repetir sus tragedias. Por eso estamos en el Concejo rindiendo homenaje en el marco de la semana de la Memoria, la Verdad y la Justicia y dejando también inaugurada la muestra artística Grandes Personalidades de la Política Argentina, de Gabriel Brito», comenzó su discurso el concejal Gastón Gómez, organizador del acto. Lo acompañaron los ediles Carlos Arnedo, José María Franco, Carlos Ale, Ana González, Federico Romano Norri y Facundo Vargas Aigansse.

«Es fundamental estar presentes en esta fecha y que reconozcamos la verdad. Estamos para conmemorar y reivindicar a las víctimas del terrorismo de estado. Estamos para seguir peleando por Memoria, por Verdad y por Justicia. Porque tenemos que reconocer la lucha de las organizaciones de Derechos Humanos y de todo el pueblo argentino para recuperar el estado de derecho y la democracia. Hay que seguir forjando la memoria. Estos hechos no pueden ocurrir nunca más», agregó Gómez. Y finalizó: «Si queremos tener y construir un país con equidad, con justicia, con igualdad de oportunidades no podemos olvidar el pasado. Con Molina y con Pisarello reconocemos a las víctimas del terrorismo de estado, manteniendo el legado del pueblo que se sintetiza en el NUNCA MÁS. Por eso, insistimos juntos y con firmeza: son 30.000 desaparecidos. Memoria, Verdad y Justicia», colmando de aplausos el vestíbulo del Concejo, donde están dispuestas las 15 piezas de la exposición.

Tras recibir sendos diplomas honoríficos por su «incansable labor por los derechos políticos y sociales», los familiares de Dardo Molina y de Ángel Pisarello agradecieron el reconocimiento.

«En nombre de mi familia y en especial de mi padre -que anda hablando por ahí con todo su legado-, hago extensivo el agradecimiento a don Amado Juri -padre del presidente del Concejo, Fernando Juri-, quien también fue víctima del terrorismo de estado. Estuvo apresado 3 años en la cárcel de Villa Urquiza», expresó Josefina Molina, hija de Dardo Molina, señalando los cuadros de su papá y de Amado Juri. «Quiero recordar a todas las víctimas del terrorismo de estado y también del Operativo Independencia, de cuyo inicio se han cumplido 50 años. Agradezco también el acompañamiento de mi familia hermana, la familia Pisarello, por lo que siempre digo que el peronismo y el radicalismo estaremos siempre juntos», finalizó Molina. Su padre estuvo desaparecido desde su secuestro en diciembre de 1976 hasta 2014, cuando sus restos fueron identificados por antropólogos forenses en el Pozo de Vargas -en Tafí Viejo-, la fosa de inhumación clandestina más grande del país.

A su turno, Ana María Pisarello -hija de Ángel Gerardo Pisarello-, aprovechó para honrar la memoria de su padre y de su hermana, Tatá Pisarello -fallecida recientemente-, también una incansable luchadora por los derechos humanos, defensora de la educación pública y militante política. «Ángel Gerardo y Tatá Pisarello presentes, ahora y siempre», finalizó.

En el cierre del acto, Gabriel Brito reconoció la reapertura del Concejo como un nuevo espacio cultural en la ciudad: «los artistas tenemos un espacio abierto, plural y participativo para la cultural en la ciudad, que nos permite realizar muestras en fechas tan importantes», expresó.